jueves, 29 de enero de 2015

Diseñador de deseos a medida

Te voy a coger las medidas.... por favor estate quieto un momento, ok, 90 de felicidad, 60 de ilusión, 90 de complicidad... perfecto 

Compartir un petit suit con alguien es una inmundicia,
Comparable al lustro que se pasa sin tus caricias,
Te paras y te sientas, lías entre el papel un poco de injusticia,
Te fumas la penúltima calada de lo que callabas y a la vez decías. 

Me gustaría ser tu diseñador de deseos a medida,
Y no un vulgar ser que se contenta con mirarte en la distancia cada día,
El capitán que anclase tus penas y codicias,
El traficante que malvendiera las noches que abandonas la guarida. 

Y en vez de eso no reparo las conversaciones acabadas,
Mientras salto sin peligro vacíos de luces cegadas,
Y en vez de eso voy rompiendo tejas entrecortadas,
Mientras recorro cual ladrón azoteas ilusionadas.

Me gustaría verte más cerca de la salida, de la salidas,
Y no que sigas rebuscando por las alcantarillas,
Que guardan tus feas costumbres y divinas malicias,
Que desaparecen de golpe si gastas una de tus adorables sonrisas.

Y en vez de eso me conformo, me paro y no hago nada,
Mientras la arena se mueve y se cuela en la playa,
Y en vez de eso voy rompiendo tejas entrecortadas,
Mientras recorro cual ladrón intenciones enmascaradas.